COMPLEJO PARROQUIAL
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COMPLEJO PARROQUIAL “SAN JOSEMARÍA ESCRIVÁ DE BALAGUER”

 

Si exaltatus fuero a terra, omnia traham ad meipsum (Jn 12,32)
 
Dos edificaciones perfectamente diferenciadas, el templo y el centro parroquial, que buscan su unión a través de la estética y de la composición de los espacios exteriores.
 
El conjunto eclesiástico busca la máxima sencillez, huyendo de formalizaciones rebuscadas o complicadas, eligiendo unas formas geométricas escuetas que se combinan sin artificios, pero que el resultado en conjunto es grandioso.
 
El templo situado en un cruce de caminos por el que circulan gran cantidad de personas, presenta la oportunidad de hacer visible el mensaje de la Cruz, situando este símbolo a la mayor altura permitida por la normativa urbanística.
 
Es clave en la concepción del proyecto el tratamiento de la luz, se plantean unas grandes cristaleras traslúcidas a ambos lados de la nave central del templo que proporcionarán una luz difusa sobre el templo, casi en ningún momento con incidencia de rayos de sol. El resto del templo y del centro parroquial tiene unos huecos de ventanas muy medidos, de proporciones verticales.
 
Siguiendo la amplia tradición de los edificios religiosos se busca inspiración en la simbología bíblica:
 
– El “ cuatro ”, o cuadrado que simboliza lo terrenal y limitado, pues cuatro son los vientos, puntos cardinales y estaciones. Con el cuatro simbolizamos el mundo que va a convertirse en ofrenda por los cristianos.
* Forma cuadrada del templo.
* Forma rectangular del centro parroquial.
* Orientación de los vértices del templo hacia los cuatro puntos cardinales.
 
– El “ siete ”, número de plenitud en la Biblia y en la vida de la iglesia (siete sacramentos, dones del Espíritu Santo , obras de misericordia. Con el siete mostramos que las buenas obras se han cumplido con perfección, como cuando Dios terminó la creación el séptimo día:
* Siete recuadros del templo en cada sentido.
* Siete recuadros del centro parroquial en sentido longitudinal. El cincuenta, como número siguiente al 7 x 7, representa el cumplimiento al máximo, el Jubileo con el que el pueblo de Israel comenzaba de nuevo porque se había cumplido un ciclo.
* El número de recuadros del templo (7 x 7 + la Cruz = 50)
 
– El “ ocho ”, que simboliza el octavo día, el día eterno, los cristianos somos introducidos por el bautismo.
* Ocho lados de la nave central y de las capillas laterales del templo.
 
– El “ doce ”, signo de la iglesia, fundada sobre los apóstoles.
Está presente en: * Doce columnas de la terraza del templo (6 al Suroeste y 6 al Noroeste )
Las zonas exteriores del templo están tratadas de manera que brinden un lugar agradable para la convivencia y el trato entre los feligreses, ya sea antes o después de las celebraciones o actividades. También los amplios vestíbulos o explanadas cubiertas, tanto en el templo como en el centro parroquial, pueden aportar un lugar adecuado para el encuentro interpersonal en los momentos de climatología más severa.
 
Por último, las diversas salas del sótano del templo pueden ser ofrecidas a la iniciativa de los fieles para diversos eventos.
 
Se potencia la dignidad del culto proporcionando que la música y el canto sacro ayuden a una mejor oración comunitaria. Por ello se ha cuidado el coro superior, tanto en su enclave central como en las condi ciones de amplitud y forma que ayuden a su mejor sonoridad. También se incluye un espacio más pequeño cerca del presbiterio para un grupo coral más reducido. Se proporcionan espacios adecuados e n el sótano para los ensayos musicales.